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Una medicina antigua ayuda a combatir la calvicie, dicen los expertos

Los dermatólogos que se especializan en la pérdida de cabello informan que un componente clave de un tratamiento tópico funciona aún mejor cuando se toma en pequeñas dosis por vía oral. El minoxidil tópico no siempre es efectivo para los pacientes a los que no les gusta la sensación del producto en el cabello y, por lo tanto, dejan de usarlo. Sin embargo, los resultados son diferentes cuando se administra por vía oral.

Los anuncios están en todas partes, junto con afirmaciones exageradas: hay shampo’s y tratamientos especiales, algunos de los cuales cuestan miles de dólares, que supuestamente hacen crecer el cabello. Sin embargo, muchos dermatólogos que se especializan en la pérdida de cabello afirman que la mayoría de estos productos no funcionan. Hay una gran cantidad de medicamentos ineficaces para el crecimiento del cabello», a menudo a un «costo considerable», dice Brett King, dermatólogo de la Escuela de Medicina de Yale, pero agrega: «Debido a que las personas están desesperadas, estos medicamentos para el crecimiento del cabello continúan proliferando». Sin embargo, según él y otros dermatólogos, existe un tratamiento económico, que cuesta solo unos pocos centavos al día, que restaura el cabello en muchos pacientes. Este es el minoxidil, un medicamento antiguo y bien conocido para tratar la pérdida de cabello, pero se usa de manera diferente. En lugar de aplicarlo directamente en el cuero cabelludo, se prescribe en tabletas en dosis muy bajas.

Aunque un número creciente de dermatólogos están prescribiendo tabletas de minoxidil en dosis bajas, el tratamiento sigue siendo relativamente desconocido para la mayoría de los pacientes y muchos médicos. No ha sido aprobado por la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA) para este propósito, por lo que se prescribe fuera de las pautas establecidas en su prospecto, una práctica común en el campo de la dermatología. «Nos llamo a nosotros mismos los ‘chicos malos de los productos no aprobados’, un título que estoy orgulloso de usar», dice Adam Friedman, profesor y jefe del Departamento de Dermatología de la Universidad George Washington. Explica que los dermatólogos están capacitados para comprender cómo funcionan los medicamentos, lo que les permite probar medicamentos no aprobados. A menudo, en dermatología, está claro si un tratamiento está funcionando: ¿la erupción desaparece o no? Robert Swerlick, profesor y presidente del Departamento de Dermatología de la Facultad de Medicina de la Universidad de Emory, está de acuerdo. «Le digo a la gente que la mayor parte de lo que prescribimos no está aprobado, porque este uso no está establecido en el prospecto», dice. Swerlick enumera una serie de enfermedades, como trastornos de la pigmentación de la piel, trastornos inflamatorios de la piel y picazón incesante, para los cuales los tratamientos estándar no están aprobados de acuerdo con el prospecto.

Minoxidil, el ingrediente activo de Rogaine, una loción o espuma que se aplica al cuero cabelludo, fue aprobado por primera vez para los hombres en 1988 y para las mujeres en 1992, y ahora es genérico. El uso de la droga en el tratamiento del crecimiento del cabello se descubrió accidentalmente hace décadas. Las tabletas de minoxidil en dosis más altas se usaron para tratar la presión arterial alta, pero los pacientes a menudo se dieron cuenta de que el tratamiento hacía que el cabello creciera en todo el cuerpo. Por lo tanto, el fabricante desarrolló una loción de minoxidil (que resultó llamarse Rogaine) y obtuvo la aprobación para hacer crecer el cabello en las cabezas calvas.

Sin embargo, los dermatólogos afirman que la loción o espuma no siempre es muy efectiva para algunos pacientes, tal vez porque dejan de aplicarla. Necesita llegar al cuero cabelludo y el cabello puede interponerse en el camino. Muchas personas, especialmente las mujeres, dejan de usarlo porque no les gusta dejar la sustancia pegajosa en su cabello. Johnson & Johnson, la compañía que actualmente posee Rogaine, no respondió a las solicitudes de comentarios. Otros simplemente piensan que no funciona para ellos. Minoxidil necesita ser convertido en una forma activa por las enzimas sulfotransferasas, que pueden o no estar presentes en cantidad suficiente en las raíces del cabello. Cuando el medicamento se toma por vía oral, se convierte automáticamente en la forma activa. Aún así, esa no fue la razón por la que se descubrieron las píldoras de dosis baja, lo que también ocurrió por casualidad hace 20 años.

Rodney Sinclair, profesor de dermatología en la Universidad de Melbourne en Australia, tuvo un paciente con alopecia de patrón femenino. El cabello en la parte superior de su cabeza era menos denso y odiaba la forma en que se veía. A diferencia de la mayoría de sus pacientes, Rogaine trabajó, pero desarrolló una erupción alérgica en el cuero cabelludo debido a la droga; Sin embargo, si dejaba de tomarlo, su cabello volvería a perder volumen.

«Así que estaba en un dilema», dijo Sinclair. «El paciente estaba muy motivado, y lo único que sabíamos era que si un paciente es alérgico a un medicamento tópico, una forma de desensibilizarlo es administrarle dosis muy bajas por vía oral».

Para hacer esto, Sinclair intentó cortar las tabletas de minoxidil en cuatro partes. Para su sorpresa, la dosis baja hizo que su cabello creciera, pero no afectó su presión arterial, que es el objetivo original de la droga en dosis más altas.

Posteriormente, redujo la dosis cada vez más hasta que alcanzó dosis efectivas de una cuadragésima parte de una tableta y comenzó a prescribir el medicamento de forma rutinaria. Ese primer paciente todavía lo toma. En una reunión celebrada en Miami en 2015, Sinclair informó que las dosis bajas de minoxidil causaron que el cabello creciera en 100 mujeres en casos consecutivos.

Sinclair publicó estos resultados en 2017, donde señaló que se necesitaban estudios rigurosos en los que algunos pacientes recibieran minoxidil al azar y otros una píldora de azúcar como control, pero eso aún no ha sucedido. Dijo que hasta ahora ha tratado a más de 10.000 pacientes.

Recientemente, un número creciente de dermatólogos especializados en pérdida de cabello han estado prescribiendo tabletas de minoxidil en dosis bajas a pacientes con pérdida de cabello de patrón masculino y femenino, un problema común a medida que uno envejece.

«Su popularidad está empezando a crecer», dice Crystal Aguh, dermatóloga de la Facultad de Medicina de la Universidad Johns Hopkins. «En las conferencias, compartimos nuestras historias de éxito con más frecuencia».

Los médicos que no se especializan en la pérdida de cabello, agrega, «no estarían familiarizados con el minoxidil oral», excepto como un tratamiento que rara vez se usa para tratar la hipertensión y que viene con una advertencia de que puede causar problemas cardíacos. Según ella y otros expertos, la advertencia se refiere a dosis mucho más altas.

Si la pérdida de cabello es grave, el minoxidil no será efectivo, dice Agh. «Por ejemplo, no funcionará si un hombre es casi calvo, con un cuero cabelludo brillante. No hay nada que restaurar». Agrega que el paciente ideal no es completamente calvo, pero ha perdido suficiente cabello para que incluso un observador casual lo note.

Sin embargo, sin un ensayo clínico riguroso que conduzca a la aprobación de la FDA, el uso de tabletas de minoxidil para la pérdida de cabello sigue siendo no autorizado para este propósito y, según los dermatólogos, es probable que siga siéndolo. «El minoxidil oral cuesta centavos al día», dice King. «No hay motivación para gastar decenas de millones de dólares para participar en un ensayo clínico. En realidad, ese estudio nunca se llevará a cabo».

Algunos pacientes que toman dosis bajas de minoxidil, sin embargo, notan el crecimiento de vello facial no deseado. Así que algunos dermatólogos, incluido Sinclair, han agregado otro medicamento, espironolactona en dosis muy bajas, otro medicamento para la presión arterial que también inhibe ciertas hormonas sexuales llamadas andrógenos, para prevenir el crecimiento de vello no deseado.

Los pacientes que prefieren seguir las pautas de la etiqueta optan por medicamentos de venta libre, que algunos dermatólogos dicen que son ineficaces, o uno de los dos productos aprobados por la FDA para el crecimiento del cabello. Estos dos productos son Rogaine y finasteride, un medicamento genérico utilizado en dosis más altas por los hombres para tratar la hiperplasia prostática benigna. Como tratamiento para la pérdida de cabello, está aprobado solo para hombres. También se ha relacionado con la disfunción sexual.

Luego está el boca a boca sobre el minoxidil en tabletas. «He visto milagros», dice Agh. Uno fue con Brandy Gray, que tiene 44 años y vive en Monkton, Maryland. «Con el tiempo, perdí el cabello», dice. «Entonces comencé a tener áreas circulares», sin pelo. «Estaban empeorando cada vez más». Había consultado a otro dermatólogo que le recetó champús y suplementos, pero fue en vano. Finalmente, dice que su dermatólogo le dijo: «No hay nada más que pueda probar contigo, no puedo hacer nada más». Consultó a Aguh, quien le recetó minoxidil en dosis bajas. Diez meses después, su cabello era grueso y abundante. «Puedo peinarme de varias maneras», dice. «Ya no uso pelucas».

Es como si nunca hubiera pasado por esta pérdida de cabello.

Gina Kolata escribe sobre ciencia y medicina. Es dos veces finalista del Premio Pulitzer y es autora de seis libros, incluyendo «Mercies in Disguise: A Story of Hope, a Family’s Genetic Destiny, and The Science That Saved Them».

Brandy Gray, de 44 años, fue tratada por Crystal Aguh antes y después del tratamiento con minoxidil oral.

Por Gina Kolata
Publicado 19 de agosto de 2022 no The New York Times.

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